martes, 22 de diciembre de 2009

Capitabujarromática

















En la copa
nocturnofantasmagórica,
profundofierodesplántica,
insomnolunatacónica
y gelegoucrasemántica;
su rostro alatinógeno,
mi mano romasdistálica,
su pelo metamorfóico,
mis besos despiertaimágenes.

He visto emborrachándome
su cara Cristoicónica,
sus ojos gratificantes,
mis pies rotosanguíneos,
sobre ideas poco románticas.

Las sábanas verde botánicas,
los versos rotritrimétricos,
el fondo cavahermético
del alcohol de mis lágrimas.

Pensamientos burbujoeternoascendentes,
preguntas de poca importancia,
mesita tras una palmera:
Dickens, coca-cola y un cava…

Inventos antipoéticos
zapatos reconfortantes,
la foto sin rostros visibles,
los dedos medio asfálticos.

Un ole con ole y ole,
un deje de humo gitano,
una bramlina un poco molesta,
y el tan esperado apretón de manos.

La “cena” verlairimbautica,
la atracción mudo sinética,
la innombrable poética
dichosa, que tendrá en sus manos.

Y más jotonigeica ,
chaqueta genialmente patética,
rubores de bares sin rumbo
con seres de burrotocrásia.

Josemaría franciscoairámica,
carmecapitabujarromática,
tarimofléxia zapateótica
alegría palmocaótica, desesperante.

Llovizna de conga cubana,
cruelmente inspiradora,
inalcanzable a tres centímetros de distancia,
suspendida sobre la bola,
que lo siento, no está ahora.

Un rato de patosiméria,
otro de taxisacojotefloreinfectante
y uno con hondos suspiros (cansado)
y el otro (zapatos en mano)con fieros desplantes .

Y no, no hablaré del final,
tan tristemente decepcionante,
la jotanigéica añorada
dolchetobosocervántica,

El golpe del hombro sangólfico
en la calle josebellogalvánica,
dos delfines de hielo en wiskonsi,
no derretidos, Joaquín, separados!

No hay comentarios:

Publicar un comentario